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Los planes de Dios | Comentarios (pág.2)

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Mayela Barrantes(31-05-2021)
En los planes de Dios pongo mi esperanza, rescato esta virtud teologal: Esperanza. Significa confianza, expectativa, seguridad, deseo expectante y camino para llegar a Dios. Esperando contra toda esperanza, como Abraham (Rom 4, 18), la esperanza cristiana es confianza de poder conseguir la meta. Esperamos lo que no vemos (Rom 8, 25). La esperanza expresa la confianza en la ayuda de Dios y la aspiración o tensión hacia la plenitud del ser humano, a su felicidad. Nos apoyamos en las promesas de Dios, que es siempre fiel (Heb 10, 23). En las situaciones más difíciles y desesperanzadas, hay que esperar contra toda esperanza (Rom 4, 18). Que seria del hombre o mujer si no depositamos nuestra esperanza en Dios, en el largo y muchas veces tedioso camino de la vida. La ayuda de tantos buenos sacerdotes y laicos comprometidos también es significativa en tiempos de crisis espiritual. El testimonio de amor que se recibe, también ayuda en el caminar personal. La promesa es fiel, velemos de dia y de noche, no se sabe la hora. El Señor nunca nos suelta de su mano, creo en esto.
¿Qué sería de nosotros sin la esperanza? Es una buena pregunta, no en vano el maligno se empeña en desesperarnos. ¡No perdamos la esperanza! ¡Ánimo!
Jorge Amezcua(27-05-2021)
Estimados señores, les aradezco muchisimo la dedicación y preparación en su reflexión que hoy leí en sus textos. No tengo duda de que la Palabra de Dios es viva y eficaz y que sólo regresa a Él cuando ha cumplido su voluntad. Estoy en un periódo de prueba y me anima la palabra de Dios, que por este medio recibo, para buscarlo y conocerle un poquito más, y para reconocer y poner toda mi confianza en sus planes y en sus tiempos. Esto no es fácil para mí, porque me abruman muchas preocupaciones, dolor, coraje, angustia, desesperación, ansiedad, frustración, depresión y muchos mas sentimientos encontrados que me hacen pensar que Dios no me escucha porque no me habla verbalmente, porque no sabes si haces bien o mal las cosas, porque siempre hay algo que se contrapone y que piensas que ya no hay solución al problema y este sigue creciendo. Sin embargo, en este momento de prueba, siento que Dios se comunica conmigo de otra manera muy personal y lo siento al escuchar su palabra que me anima a confíar en Él, a esperar e Él, a seguir pidiendole su auxilio para que me indique que quiere el Señor de mí. Me uno a nuestro Señor Jesucristo y en su Nombre, dirigirme en una oración sencilla, humilde y confiada para obtener de nuestro bendito Padre Celestial su cariñosa repuesta, tomando su mano y acercándola a mi cara para cobijarme y para decirle con un gesto de caricia y ternura: ¡Cuídame Dios mío, te necesito, abrazame fuerte porque sólo estoy a gusto contigo!. Saludos cordiales, desde Puebla México.
La paz, Jorge. Dios bendiga y escuche su oración. Nos unimos a ella. Y no dude en pedir ayuda a sacerdotes y especialistas católicos santos de su zona. Gracias por su mensaje.