¡Enhorabuena, has en­con­tra­do un te­so­ro! Este ar­tícu­lo es par­te de un cur­so que te in­vi­ta­mos a co­no­cer: Curso Católico.

Venta de la Primogenitura | Comentarios (pág.2)

Más co­men­ta­rios

Mervin Aguilera(30-04-2021)
No es sen­ci­llo cuán­do nos sen­ti­mos mo­rir. ¿Si mue­ro de que me sir­ve…? Y acep­tá­mos el pla­to de len­te­jas, pues aún no apren­de­mos a vi­vir al lí­mi­te sus­ten­ta­dos por la Fe.
Cierto, no es sen­ci­llo. Sin em­bar­go, pue­de ayu­dar el he­cho de te­ner ex­pe­rien­cia ya en la tie­rra de lo que es el cie­lo (la pri­mo­ge­ni­tu­ra pro­me­ti­da), pues cuan­do lo co­no­ces tie­nes un ma­yor ali­cien­te.